7 de octubre de 2013

He cerrado herméticamente puertas y ventanas
para que así no vuelva la pena
a destruir los pilares de la utopía.
Las lluvias pretendieron lavar la memoria
para que no doliera,
¿Es verdad o solo existe en el recuerdo
en el pasado
en la inexistencia?
¿Hay que hablar de lo que se recuerde?
Recuerdo…
deslizo el lápiz
tu nombre resuena.
Ojalá nada hubiera sido malgastado
ni pisoteado
ojalá el miedo no hubiese existido
actuando como un cruel asesino.
No logro negar el dolor
borrar tus huellas
solo puedo reconocerlo, renovarlo.
Dicen que el amor es la más fuerte de las pasiones
y su silencio duele en el alma.

3 comentarios:

Juan A. dijo...

El silencio duele hasta reventar.

Darío dijo...

No lo niego. A veces me cierro sobre mi. Si encuentro poemas así, lo uso de escudo. Un abrazo.

Vivian dijo...

Primero: Me encanta, pero me encanta que hayas cambiado la foto del perfil, diste un giro de 180º! La otra era muy triste, ahora con esa sonrisa derribaremos el mundo, sí.
Y los versos también me gustan, ni se te ocurra abrir las puertas y las ventanas, la pena que se quede por allá (quién sabe dónde) que a ella nadie la necesita.
Un beso Lunática.