Sueño para entender las cosas
la memoria es complicada, como los laberintos,
se pierde desde su misma sombra.
Ahora es cuando empiezo a recobrar la herida:
tu ausencia.
Todo lo que es no ha
empezado nunca.
Aquella breve
tormenta, demasiado efímera
era la señal de que
imperceptiblemente algo había cambiado.
La vida me porta a un
burdel:
siempre eligiendo.
Cierro los ojos para
guardar el instante.
Pero eso fue otro
espacio,
un espacio perdido en
la memoria
(ubicado en el
corazón)
No estoy suelta del
todo
porque estoy en unión
con todo,
además la persona es
todo.
Sé que me elegiste.
Odio y amo.
Kilómetros de arena,
sobre la arena
extienden los rescoldos del fuego.
Las cenizas exhiben
el dolor,
la mayor pérdida que
muere dentro.
“El silencio se
propaga,
el silencio es fuego”.