13 de julio de 2013

Sólo tengo el grito

Sueño para entender las cosas
la memoria es complicada, como los laberintos,
se pierde desde su misma sombra.
Ahora es cuando empiezo a recobrar la herida:
tu ausencia.
Todo lo que es no ha empezado nunca.
Aquella breve tormenta, demasiado efímera
era la señal de que imperceptiblemente algo había cambiado.
La vida me porta a un burdel:
siempre eligiendo.
Cierro los ojos para guardar el instante.
Pero eso fue otro espacio,
un espacio perdido en la memoria
(ubicado en el corazón)
No estoy suelta del todo
porque estoy en unión con todo,
además la persona es todo.
Sé que me elegiste.
Odio y amo.
Kilómetros de arena,
sobre la arena extienden los rescoldos del fuego.
Las cenizas exhiben el dolor,
la mayor pérdida que muere dentro.
“El silencio se propaga,
el silencio es fuego”.