10 de febrero de 2013


Una vez me susurraron:
“No debes dar nada por hecho”,
y supe que de un silencio vendría la respuesta.
Hoy, me recuerdo:
todo está construido sobre el autoengaño.

2 comentarios:

Juan A. dijo...

No hay verdad más cruel que la del silencio. Pero tú lo has dicho infinitamente mejor.

Besos, lunáticasuicida.

Unknown dijo...

Hay veces que sólo nos salva el autoengaño. Juan Antonio tiene razón, a veces lso silencios son verdades crueles e inapelables.
Me ha gustado, mucho.
Besos.