20 de julio de 2014

Dos largos paréntesis encarcelan mi tiempo,
ni raudo ni tardo,
es anodino.
El pasado me devuelve
exhibe su pretensión:
“la vida se elige”, susurra.
Siempre cohibiéndonos.

2 comentarios:

Darío dijo...

Nos acogota Don Pasado...

José A. García dijo...

La vida se elige, el pasado se sufre.

Suerte

J.