Me
como las palabras. Ellas me consumen,
engullen,
devoran, perforan, golpean…
bam,
bam.
Luchan
letras contra letras magreando
todo
el ser correspondiente.
En posibles
ocasiones las aniquilo,
otras
las mimo, de vez en cuando las rehúyo,
no
obstante constantemente residen en mí.
4 comentarios:
Y finalmente salen. Que es para lo que están ahí. Para ser dichas.
Residen en ti... qué bonito.
Que se peguen entre ellas, siempre quedarán las miradas y los gestos para expresar lo que las palabras no quieren o no pueden decir.
Un saludo!
Todas las palabras, todas las letras, sus infinitas e inabarcables combinaciones, están en nosotros. Da un poco vértigo pensarlo.
Un besazo.
Es verdad...estás hecha de palabras.
Gritadas, susurradas o no pronunciadas.
Valientes, sumisas o suicidas.
¿Qué importa?
Eres lo que eres -en gran medida- gracias a ellas.
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